“El futuro le llegó a la Ley Fintech”; Bitso presenta guía de principios regulatorios para las criptomonedas
A casi cinco años de la publicación de la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera, conocida como Ley Fintech, es momento de replantear algunos temas, como el de criptomonedas, pues lo aterrizado, vía disposiciones secundarias, ha sido rebasado por la innovación y casos de uso, por lo que es necesario acotar riesgos que han estado presente en la industria y que se han reflejado en casos como la caída de FTX.
Bitso, uno de los jugadores más relevantes del ecosistema de criptomonedas América Latina, ha presentado un decálogo con ocho puntos con el fin de delinear un camino regulatorio que no limite la innovación de estas herramientas, pero que a su vez brinde certeza y seguridad al usuario para, según la firma, generar un sistema financiero más incluyente en la región.
“Bitso es una compañía que desde que empezó a operar, ha puesto por delante muchos temas, como transparencia, seguridad y protección al consumidor, por encima de un crecimiento más acelerado… Dado el ambiente y lo que ha pasado en los últimos meses, creímos importante hacer explícitas estas cosas que se platican internamente, que nos han regido sobre cómo operamos”, explicó Vallejo.
De acuerdo con el directivo, al crear la Ley Fintech se tuvo la intención que el marco regulatorio fuera flexible, vía disposiciones secundarias, de acuerdo con los tiempos e innovaciones que se presentan con el paso del tiempo, por lo que, a casi cinco años de su promulgación, es momento de hacer algunos ajustes a esta normativa.
“Una de las cosas importantes de la Ley Fintech era intentar dejar que la ley general fuera de principios y que se fuera mucho a regulación secundaria, con la idea de que fuera muy flexible y se pudieran hacer cambios en el futuro. El futuro ya llegó y ya nos hemos dado cuenta que hay tornillos que apretar y cosas que cambiar, sobre todo que son cambios de ley secundaria”, explicó Vallejo.
El marco normativo general de la Ley Fintech obligó a Banco de México a determinar las reglas secundarias para la operación de activos virtuales en el país; sin embargo, este organismo se limitó a establecer la distancia entre las instituciones financieras reguladas y dichos instrumentos, mientras que avaló que la tecnología blockchain puede ser utilizada para la operatividad interna de las entidades, sin trasladar riesgos al usuario final, siempre y cuando se tenga el aval de dicha autoridad.
Asimismo, la Ley Fintech estableció que toda entidad que no fuera institución financiera regulada, pero que operara con criptomonedas, ya sea para su compraventa al público en general, se diera de alta como actividad vulnerable ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Para Vallejo, las áreas de oportunidad en materia regulatoria para el ecosistema de criptomonedas México se presentan en vertientes como: procesos de aplicación, temas de ciberseguridad y prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, entre otros.
Reglas conforme a la realidad de la región
Si bien, en las últimas semanas se ha hablado mucho sobre mayor regulación para evitar casos como la caída del gigante FTX, para Vallejo muchas se tiene la intención de crear reglas que no mitigan los riesgos, generan productos de difícil adopción y que no van conforme a la realidad de las regiones, especialmente las más desfavorecidas en términos de inclusión financiera.
En este sentido, Bitso presentó el decálogo del camino regulatorio a seguir, el cual está conformado por los siguientes ocho puntos:
- Defender los intereses de los clientes sobre todo lo demás. Para Bitso, la protección al consumidor es valiosa, por lo que se dice apoyar las regulaciones que no sólo protejan al usuario, sino también sus derechos.
- Custodia segura de fondos. La firma aseguró tomar todas las precauciones necesarias para resguardar los activos de sus clientes ante eventualidades inesperadas, por lo que ofrece respaldo y promoción a las políticas públicas que aseguren mejores prácticas custodiales, cada vez que los clientes confíen sus ahorros o activos a un tercero. “Nunca usaremos los fondos de los clientes sin su permiso explícito”.
- Sistema financiero verdaderamente inclusivo. Para Bitso, la regulación financiera internacional se ha construido desde y para el privilegio; sin embargo, con las criptomonedas esto puede ser “de todos y para todos”, por lo que aboga por regulaciones, políticas y prácticas que prioricen los intereses de aquellos que han sido descuidados por el sistema financiero tradicional.
- Neutralidad tecnológica. De acuerdo con Bitso, las tecnologías no son inherentemente buenas o malas, por lo que los usuarios tienen el derecho de usar cualquier herramienta blockchain para atender sus necesidades.
- Reglas antilavado efectivas. Desde hace años, el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI, por sus siglas en francés) contra el lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, ha trazado la ruta regulatoria para la prevención del blanqueo en las criptomonedas; sin embargo, pese a que Bitso ha mostrado compromiso para cumplir con los estándares, ha identificado que algunos de éstos son desproporcionados como restrictivos para el ecosistema.
- Educación como conductora de toma informada de riesgos. Bitso es enfático en que la educación financiera, acompañada de políticas adecuadas, puede hacer que los clientes aprovechen los beneficios de las criptomonedas, con decisiones financieras acertadas, por lo que aboga por impulsar el conocimiento al respecto.
- Acceso sin fronteras a servicios financieros. Uno de los puntos donde Bitso ha sido más activo en los últimos meses, es en los pagos transfronterizos sustentados en la tecnología blockchain, los cuales reducen los costos que se manejan en los mecanismos tradicionales, por lo que aboga por una regulación que incentive un sistema financiero sin fronteras. “Transferir dinero entre dos países conlleva un costo promedio de más de 6% del valor total de la transacción. La experiencia de Bitso ha mostrado que los productos con respaldo de cripto pueden reducir significativamente los costos y aumentar la eficiencia de los pagos transfronterizos”.
- Acuerdos de gobernanza corporativa que fomenten prácticas éticas en las empresas. Para Bitso, es importante que las empresas del ecosistema adopten controles y procesos internos que defiendan la integridad de las operaciones y responsabilicen a mandos directivos de perseguir mejores intereses de los clientes, por lo que urge a políticas de supervisión de los tomadores de decisiones fundamentales, para protección de inversionistas y usuarios.