Esta es la taza más cara jamás vendida en una subasta: ¿cuánto costó?
En abril de 2014, el coleccionista Liu Yiqian pagó en una subasta realizada en una de las oficinas de la casa Sotheby’s, en Hong Kong, 36 millones de dólares (686 millones 232 mil pesos) por una pequeña taza de porcelana adornada con un colorido pollo. La transacción rompió el récord para la pieza de arte china más cara jamás vendida.
La compra causó polémica en aquel país, aunque no por la exorbitante cantidad de dinero que Yiqian desembolsó por ella, ni por el hecho de que utilizó su tarjeta American Express para liquidar la transacción, sino por que el millonario asiático decidió tomar un buen té directamente de ella para celebrar.
Lo anterior, debido a que la taza en cuestión pertenece a las denominadas ‘tazas de pollo’, las cuales fueron fabricadas durante la era Chenghua, un periodo de la dinastía Ming en el que el arte floreció como nunca antes.
Estas tazas poseen una textura sedosa y aunque existen miles de réplicas, solo existen diecinueve originales; los expertos las llaman el santo grial de la porcelana.
El señor Liu Yiqian, un taxista que se volvió millonario tras invertir en la bolsa y uno de los más reconocidos coleccionistas de arte, se llevó la taza luego de pelearla con otros demandantes en una batalla de ofertas que duró siete minutos.
Las imágenes de Liu bebiendo de su taza Ming se viralizaron, despertando reacciones de usuarios que criticaron al excéntrico magnate chino:
“¿Crees que puedes beberlo y convertirte en inmortal? ¿O que extenderá tu vida? De hecho, ¿no es solo una forma de satisfacer tu vanidad?”.
“Los chinos son así. Ninguna persona civilizada trataría así un tesoro cultural como este. No es de extrañar que los ciudadanos de otros países desprecien a los chinos”.
Liu Yiqian replicó a las críticas a través del rotativo China Real Time y señaló que de ninguna manera estaba intentando presumir su poder adquisitivo. Dijo que sus fotos bebiendo té se tomaron mientras estaba pagando la taza.
“Un miembro del personal de Sotheby’s me sirvió un poco de té. Vi la taza de pollo y con entusiasmo vertí un poco en la taza y bebí un poco. Una cosa tan simple, ¿qué tiene de malo eso?”.
Gracias a su rápida industrialización, China es el hogar actualmente de 4.4 millones de superricos, y muchos más se han catapultado a una riqueza considerable, que ha ayudado a impulsar el auge de un mercado de arte que ha visto compras récord como la de Yiqian.
Con información de Portafolio, The Wall Street Journal, Artnet News y El Mundo
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