Evo Morales renuncia a la presidencia de Bolivia tras perder apoyo de militares
Este domingo, el presidente de Bolivia, Evo Morales, renunció a su cargo luego de tres semanas de intensas protestas en aquel país altiplánico contra su cuestionada reelección y tras perder el apoyo de los militares, quienes señalaron que su dimisión era necesaria para aplacar la crisis política y frenar la escalada de los conflictos entre el pueblo boliviano.
Así lo informó el mismo Morales desde Chimoré, en el departamento de Cochabamba, a través de la televisión, donde añadió que los grupos de oposición que desestabilizaron su gobierno ordenaron a los manifestantes que incendiaran la casa de su hermana, Ester Morales, y las de los gobernadores de Oruro y Chuquisaca, Víctor Hugo Vásquez y Esteban Urquizu, respectivamente.
“Renuncio a mi cargo para no seguir viendo hermanos y hermanas agredidos, casas quemadas. Expreso mi solidaridad a mi hermana… Pueden quemar mi casa, pero no con mi familia. Si quieren vengarse: con Evo y con Álvaro, no con otras familias. Tarde o temprano se juzgará cómo se implementa, cómo se aplican políticas sanguinarias, como con sicarios”.
Denunciamos y condenamos ante la comunidad internacional y pueblo boliviano que el plan de golpe fascista ejecuta actos violentos con grupos irregulares que incendiaron la casa de gobernadores de Chuquisaca y Oruro y de mi hermana en esa ciudad. Preservemos la paz y la democracia
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 10, 2019
Evo Morales aprovechó para asegurar que, al contrario de lo que ha dicho la oposición, él no está escapando de las autoridades, pues dijo que su gobierno llegó ‘por la patria y no por la plata’.
“No tengo por qué escaparme. No he robado a nadie, nada. Si alguien piensa que estamos robando que me diga, que presente una prueba, una prueba de que hemos robado”.
Por su parte, el vicepresidente Álvaro García Linera, sentado al lado de Morales, anunció también su dimisión y acusó a las Fuerzas Armadas y a la Policía de haber orquestado un golpe de Estado.
Horas antes, el ahora expresidente boliviano anunció una nueva convocatoria para realizar elecciones generales luego de un informe presentado por la Organización de Estados Americanos (OEA).
En dicho documento, la organización recomendó anular la primera vuelta de los comicios presidenciales del 20 de octubre, en los cuales Morales obtuvo la victoria luego de una fuerte jornada electoral, la cual originó una ola de violencia en el país.
Las movilizaciones propiciaron que un gobernador y tres alcaldes oficialistas renunciaran a sus cargos, mientras que dos de los principales partidos opositores se negaron a participar en diálogos convocados por Evo Morales.
De acuerdo con las normas bolivianas, la presidente del Senado, Adriana Salvatierra, sería quien ocupe el cargo que dejó Morales de manera provisional, aunque no se tiene todavía claridad sobre la sucesión.
Con información de El Nuevo Herald, RT, El Economista, Clarín, Milenio y El Diario de Finanzas
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