¿Qué debes evitar en una entrevista de trabajo para conseguir el puesto?
La cuarentena ha desanimado a muchas personas que están confinadas en su casa con gran incertidumbre sobre el futuro y si tú perdiste tu empleo lamentablemente, aquí te decimos cómo conseguir otro, evitando algunas cosas durante la entrevista de trabajo.
Además de los típicos consejos de no ponerte nervioso, mostrarte seguro de lo que sabes y ser atento y amable durante el interrogatorio, El Diario de Finanzas quiere recomendarte algunas otras cosas que influyen en que entres o no en una nueva empresa.
Según El Confidencial, Pamela Lipp-Hendricks, una ejecutiva que lleva más de 20 años en el ramo de servicios financieros y que contrata talento para JP Morgan Chase, ha charlado con miles de solicitantes, pero ha notado tres errores fundamentales en todos los que no se quedan con la vacante.
Errores garrafales en entrevista de trabajo
Respuestas rápidas y ensayadas
Pamela aseguró que no se fía de aquellos que tienen una respuesta ensayada para todo y no escuchan. Le gusta la honestidad y la gente que sabe improvisar. Los solicitantes que contestan muy rápido probablemente no entenderán órdenes futuras y es bueno descubrir si su espontaneidad se vincula con sus intereses:
“Siempre has de recordar que más que una entrevista debe ser una conversación, ya que, después de todo, también estás tratando de averiguar si es el lugar adecuado para que trabajes”.
No investigar sobre la empresa
No a modo de ensayo, pero todos los solicitantes deben conocer un poco sobre los objetivos y la historia de la empresa para saber si están interesados o no. Descubrir los productos o servicios que ofrecen y realizar ciertas preguntas sobre los mismos pueden crear empatía inmediata en los reclutadores.
Suzy Welch, en entrevista para CNBC, aseguró que conocer la empresa denota un interés real por parte de la persona:
“Una vez tuve una candidata a asistente ejecutivo que parecía perfecta para el papel. Tenía mucha experiencia y superó mi prueba con creces. Nuestra conversación iba perfectamente, hasta que hice la pregunta sobre ¿qué hiciste para esta entrevista? Y ella respondió: ‘Mmm, busqué tu oficina en Google Maps’. Eso fue todo. Esa fue su preparación”.
Welch terminó contratando a alguien que había leído todos sus libros y columnas, que conocía sus antecedentes profesionales y que rondó por el vecindario donde estaban las oficinas para saber dónde aparcar cuando fuera la entrevista:
“Pensé, ‘guau, ha empezado a trabajar en este puesto antes de que lo obtuviera’. Me encantó su ingenio y valor’”.
Ser tímido y no preguntar
Los solicitantes necesitan conocer varios aspectos de su puesto y las condiciones laborales bajo las que trabajarán, eso habla de la seriedad con que lo están tomando.
Hacer preguntas es un proceso de retroalimentación que ayuda al reclutador a decidir si el candidato tiene la actitud adecuada para unirse al equipo.
Con información de El Confidencial, Unsplash y El Diario de Finanzas.
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