Trazan en Chapultepec los retos para museos iberoamericanos
El Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec, fue el marco para la declaratoria final con la que concluyó el 10° Encuentro Iberoamericano de Museos (EIM), como parte de la Conferencia Mundial de la Unesco sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible (Mondiacult) 2022, en la se incluyeron 14 recomendaciones para que los museos de la región evolucionen en consonancia con los retos sociales, culturales, ambientales, económicos y políticos del convulso siglo XXI, además de que persistan como espacios de fraternidad donde conviven las ideas y las voces más diversas.
El encuentro organizado por la Secretaría de Cultura de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y el Consejo Intergubernamental del Programa Ibermuseos, que reunió durante tres días en la Ciudad de México a especialistas de instituciones de 22 países, llegó por consenso a un pronunciamiento que coincide y respalda la nueva definición de museo aprobada hace un mes en Praga por el Consejo Internacional de Museos (ICOM, por su sigla en inglés), la cual considera inclusión, accesibilidad, sostenibilidad y ética como conceptos inherentes a su función.
Al dar lectura pública a la Declaración del 10° EIM, el presidente del Consejo Intergubernamental del Programa Ibermuseos, Alan Trampe Torrejón, indicó que esta fortalece los valores y principios emanados de aquella suscrita hace 15 años en Salvador de Bahía, Brasil, orientada a la generación de políticas públicas para los museos y la museología en la región, mediante la cooperación y el diálogo entre los países.
Así, los representantes de las 22 naciones iberoamericanas partícipes del encuentro se comprometieron a incorporar el enfoque de derechos humanos y la cultura de la paz en el quehacer de los museos; la perspectiva decolonial y de género en las instituciones y procesos museales, y articular las agendas de cultura y de desarrollo sostenible.
Los retos
Asimismo, acordaron promover medidas para paliar el impacto de la emergencia climática; democratizar los museos mediante la accesibilidad, la inclusión y el reconocimiento, además del respeto de las diversidades; luchar contra el racismo, la xenofobia, la violencia contra las mujeres, la discriminación por credo, ideología, orientación sexual, etnia y cualquier otra forma de exclusión; el reconocimiento de la “museodiversidad” y poner el acento en los valores solidarios de saberes y prácticas ancestrales.
En consonancia con esos compromisos, la Declaración del 10° EIM, recomienda fortalecer la institucionalidad pública de los museos, su financiamiento y sus normativas; fomentar las formas de gobernanza de los museos para la práctica democrática; analizar y evaluar formas más dinámicas y flexibles para la gestión de las instituciones museales en el siglo XXI.
Además de impulsar prácticas sostenibles, considerando su dimensión social, cultural, económica y ambiental; diversificar las vías de financiación, establecer alianzas intersectoriales y multiactor; fortalecer su rol educativo, promover el fortalecimiento de sus equipos y reforzar la vinculación horizontal y participativa con las comunidades.
Acompañado del coordinador nacional de Museos y Exposiciones del INAH, Juan Manuel Garibay López, y del coordinador del Espacio Cultural Iberoamericano de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), Enrique Vargas Flores, Alan Trampe, expuso que también se recomienda implementar estrategias digitales asociadas a las colecciones, a la gestión documental y a la relación con los públicos y su accesibilidad.
Finalmente, con la declaratoria se buscará fomentar la comunicación efectiva y accesible de los museos, así como la generación de sistemas de información y registros, además de la cooperación mediante el trabajo en red; reforzar la lucha contra el tráfico ilícito, tomando las acciones técnicas que permitan un mayor conocimiento y protección del patrimonio, y promover la elaboración de planes y protocolos de gestión de riesgos ambientales y antrópicos.
Los museos son resilientes
Por separado, Enrique Vargas, coordinador del Espacio Cultural Iberoamericano de la SEGIB, amplió para este diario que los museos iberoamericanos tienen que emprender nuevas formas de diálogo con sus comunidades, revisar sus narrativas de exposición, con una perspectiva más incluyente, más diversa, y que refleje las transformaciones que está viviendo el mundo.
Dijo que ve un horizonte esperanzador, porque a pesar de las crisis que los museos han vivido a lo largo de la historia, la más reciente por la pandemia de Covid-19 que obligó a cerrar muchos recintos, en la perspectiva general los museos son de los espacios más resilientes. “Los museos como las bibliotecas, como recintos que resguardan en sus acervos y archivos la memoria histórica de la humanidad, como reservorios de esa riqueza, juegan un papel fundamental en los procesos culturales y siempre han sorteado las crisis; yo soy optimista, no tengo ninguna duda de que encontrarán los mecanismos para actualizarse y fortalecerse”, concluyó Vargas.