La importancia de la rosca de Reyes para la economía mexicana
El sector alimentario en México es uno de los más importantes para economía nacional, pues representa hasta el 21 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), el 20 por ciento de la inversión privada y genera hasta 8.5 millones de empleos formales directos e indirectos; sin embargo, una de las industrias líderes en este ramo es la panificadora, encargada de hacer la popular y tradicional rosca de Reyes.
De acuerdo con el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa), Carlos Otegui Hernández, esta industria tiene un valor de mercado de 120 mil millones de pesos y genera un millón 600 mil puestos de trabajo.
Por lo anterior, la derrama económica por el día de Reyes Magos beneficiará a más de 7 mil 906 panaderías, reposterías, pastelerías y expendios de pan, fortaleciendo el crecimiento económico y contribuyendo a mejorar el PIB doméstico, lo que ayudará, al final del día, a atraer más inversión extranjera al país.
Sin embargo, debido a las condiciones económicas actuales, que apuntan a una recesión técnica como consecuencia de una atmósfera de incertidumbre y a un estancamiento de las actividades productivas, Otegui Hernández adelantó que su cámara estima una disminución de hasta un 20 por ciento en las ganancias generadas por la venta de roscas de Reyes este año.
El empresario señaló que en 2018 se obtuvo una derrama económica de 2 mil 250 millones de pesos por más de 4 millones de roscas, lo equivalente al 20 por ciento de los ingresos anuales de este sector; sin embargo, la Canainpa espera que esta cifra disminuya.
Otegui Hernández dijo que los panaderos hacen todo lo posible por fomentar la tradición de la rosca de Reyes, incluso han adaptado sus recetas a las exigencias de los nuevos paladares.
Tradicionalmente, este pan se adorna con coloridos frutos secos que simulan las joyas que estaban incrustadas en las coronas de los Santos Reyes y en su interior se introducen figuras de plástico, esto en recuerdo de que el niño Dios tuvo que ser escondido debido a la matanza de menores que realizó el Rey Herodes.
De acuerdo con la tradición católica, al momento de partir la rosca, quien encuentre esta figura blanca será el encargado de cuidar al niño Jesús hasta el 2 de febrero, lo vestirá y lo presentará al templo, como lo hizo la Virgen María.
Asimismo, la tradición mexicana señala que quienes se sacan el niño en la rosca están comprometidos a poner los tamales el Día de la Candelaria.
En lo que respecta a la disminución de las ventas, el presidente de la Canainpa apuntó que una de las razones de la disminución en la compra de la rosca de Reyes es que la fecha de esta celebración coincidirá este año con el fin de semana, lo que evitará que las empresas, trabajadores y colegios las compren.
La rosca de Reyes tiene su origen en las Saturnales, uno de los festivales anuales más importantes de Roma. En dichas festividades se elaboraba un pan redondo con higos, dátiles y miel que era repartido entre todos.
En el siglo III se insertaba en la rosca una haba seca y aquel que la encontraba era nombrado rey de reyes durante un corto periodo.
Algunas versiones apuntan a que la rosca de Reyes es una representación de la corona de Adviento, periodo de cuatro semanas previas al nacimiento de Jesús, pero en realidad México importó esta tradición de España en el sigo XVI. La rosca de Reyes festeja la visita que hicieron los sabios de oriente a Jesús.
El libro de Mateo es el único que menciona en un pasaje a los Reyes Magos, quienes siguieron la estrella de Belén para entregar los regalos que llevaban como ofrenda a quien sería el Mesías.
De acuerdo con el libro bíblico de Mateo, la palabra usada para llamar a estos misteriosos hombres era una de origen griego ‘ma’goi‘, utilizada en aquel tiempo para llamar a expertos en astrología y otras prácticas ocultistas, por lo que en algunas traducciones se les ha llamado magos, astrólogos o sabios.
Según la tradición oriental podrían haber sido hasta doce sabios o magos los que visitaron al niño Jesús; sin embargo, la tradición occidental ha elegido el número tres, probablemente basado en los regalos que estos presentaron al bebé ‘oro, incienso y mirra’, que se mencionan en el libro de Mateo.
Con información de Isu Universidad, Excélsior, Informador.mx, Forbes, El Financiero, Economíahoy, El Heraldo de México, Dinero en Imagen y El Diario de Finanzas
Portada: DIEGO SIMÓN SÁNCHEZ/CUARTOSCURO
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