Tarjetas departamentales, ¿convienen más que las de crédito?

Las personas que han estado en algún momento dentro de una tienda departamental o en los supermercados saben muy bien que existe una tarjeta particular dentro de cada establecimiento que tiene por objetivo ‘facilitar’ sus compras ahí, ya sea a través de atractivas promociones o bien, pagos a meses sin intereses. Las tarjetas departamentales son con frecuencia las más usadas por los individuos al momento de adquirir artículos especialmente en temporada de rebajas y fines de semana.

Una tarjeta departamental es un medio de pago para comprar a crédito en determinadas tiendas, y al mismo tiempo ofrecen descuentos exclusivos en la compra de ciertos productos; la mayoría de estas tarjetas es usada para comprar ropa en los establecimientos con los que se tengan convenios.

En algunos casos, las tarjetas departamentales también están avaladas por una red global de pago, como Visa o MasterCard, por lo que se convierten en una tarjeta de crédito que se puede usar en cualquier lugar que admita el pago de este tipo.

Una de las ventajas de estos plásticos departamentales es que en la mayoría de los casos, al momento de tramitarlas no revisan los antecededentes crediticios, por lo que es algo sencillo conseguir una. Aunque parezcan inofensivas, por la facilidad y las promociones que ofertan, lo cierto es que una tarjeta departamental implica mucha más responsabilidad de todo lo que parece.

De acuerdo con lo referido por el diario Dinero en Imagen, siete de cada diez personas tienen uno de estos plásticos, según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera hecha por la comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Pese a que cualquiera puede pensar que es el banco el que está detrás de estas tarjetas, lo cierto es que son las mismas tiendas las que ofrecen el crédito, y debido a lo anterior, las reglas de operación son diferentes. Por ello, antes de tener uno de estos plásticos debes tomar en cuenta los siguientes aspectos:

Tasa de interés y el CAT son mucho mayores en las tarjetas departamentales; según cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), las bancarias manejan un CAT promedio de 40 por ciento mientras las comerciales, arriba del 100 por ciento
Las comisiones de una tarjeta departamental, al igual que la bancaria, tienen un elevado costo en caso de que retrases el pago
Este tipo de tarjetas no cuenta con un seguro de saldos en caso de muerte del titular
Su uso generalmente está restringido a la cadena de tiendas que te la otorga, por lo que para realizar los pagos debes acudir directamente a un establecimiento
Si hay un problema con la tarjeta no dudes en acercarte a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco)