Le Monrob: los vestidos en renta chic and cheap que tienes que conocer

Elian, Cass y yo nos desmañanamos para la entrevista en su negocio, donde me recibieron con un delicioso té rooibos con vainilla y fresa mientras me contaban cómo montaron Le Monrob, una tienda de renta de vestidos de gala, que se ha colocado como la favorita de muchas poblanas.

Conocí Le Monrob un día en el que, como toda buena mexicana, dejé a última hora la elección de mi vestido para la boda de una amiga de la infancia que había encontrado el amor verdadero y se casaba en unos días.

Debo aceptar que se me hizo un poco extraño que el negocio de renta de vestidos de Cass y Elian fuera solamente bajo previa cita y no estuviera abierto al público como la mayoría, pero luego entendí por qué.

Los primeros rayos solares entraban por las persianas de la ventanita que daban a un autolavado en el que los conductores ajetreados comenzaron a llegar.

Entre risas y nostalgia, Elian Reyes y Cassandra Morales me contaron que se conocen desde la universidad, pero no fue hasta que se volvieron roomies que el vínculo entre ellas se fortaleció, tanto que terminaron poniendo un negocio.

Un dato curioso es que el nombre de Le Monrob proviene de un malentendido, pues Cass creía que Elian se apellidaba Robles y la llamó así un día, y a manera de broma Elian le cambió el apellido a Cass por Montes.

Hace tres años estas dos mujeres decidieron poner un negocio, pero no tenían idea de qué hasta que les propuso una idea su amiga Mayra, quien vivía en Monterrey. Ella les comentó que en el norte de México hay varios eventos los fines de semana y es una costumbre asistir acompañado, así que las chicas tienen la necesidad de estrenar vestido cada semana y para cuidar sus finanzas, prefieren rentarlos y no comprarlos.

Así fue como Cass y Elian compraron diez vestidos en una proveedora de la familia de Elian y abrieron una página en Facebook para ofrecer sus productos:

“Invertimos aproximadamente 12 mil pesos en las prendas, los portavestidos, la página y las fotos para el sitio”.

Después de unos días ya tenían varios mensajes de usuarias interesadas en los vestidos.

Como Le Monrob no contaba con un espacio para su negocio en sus inicios, Elian y Cass ofrecían servicio a domicilio y aún recuerdan el nombre de su primera clienta: su amiga Sofía.

Cass y Elian explicaron que el error más común de cualquier mujer al comprar un vestido, según su experiencia, es que nunca más lo vuelven a usar o tal vez sí, pero dos o tres veces a lo mucho porque, seamos sinceros, todas queremos brillar y a ninguna le gusta repetir diseño.

Cass reveló lo siguiente:

“El color del vestido de las damas de honor lo elige la novia y no siempre es tu favorito ni el que mejor te queda. En las graduaciones también pasa que quieres verte radiante y escoges uno muy llamativo que no puedes utilizar en otros eventos, como en una boda”.

Ellas aseguraron que es mejor rentar un vestido que comprarlo; además, hay otras ventajas, entre las que destaca el proambientalismo.

La naturaleza necesita que algunas industrias dejen de sobreproducir y generar desechos que afectan al planeta y la moda es una de ellas, así que lo mejor es reutilizar.

Cass comentó que otra desventaja de comprar vestidos es que pueden abarcar mucho espacio en tu clóset. Además, qué mejor que recibir asesoría sobre tu outfit en Le Monrob, así como precios más baratos que al adquirirlos.

Según Elian, en Le Monrob no solo te ayudan a elegir el vestido ideal, sino también le realizan los ajustes necesarios para que te veas espectacular.

Esta tienda de renta de vestidos, creada por Elian y Cass, incluye en el precio final precio el costo de la confección, la tintorería y hasta una bolsa clutch que te combine.

Para establecer sus precios, Le Monrob hace un análisis de mercado, basándose en otras tiendas de renta de vestidos, en la economía de la región y en los costos de sus materiales y productos.

Me atreví a preguntarle a este ameno dúo qué las distingue de su competencia, a lo que Cass contestó que la atención personalizada:

“Nuestras clientas se quejan constantemente de que en muchas tiendas de renta de vestidos no las pelan literalmente y dejan que ellas solas vean y elijan, haciéndolas sentir incómodas por la apatía de interacción”.

En Le Monrob te ofrecen la talla adecuada a sus clientas y les ofrecen los modelos y colores indicados de acuerdo con su tipo de cuerpo, por eso es que atienden solo bajo previa cita, pues su atención solo se enfoca en ti:

“Aquí no solo rentas un vestido, sino una experiencia, pues Cass y Elian intentan asesorarte sobre colorimetría, tipos de cuerpos y detalles que le vendrían bien a tu vestuario de acuerdo con tu presupuesto”.

Los vestidos de Le Monrob son de alta calidad y no solo dan ‘el gatazo’ en fotos, como muchas otras boutiques. Asimismo, aquí encontrarás tallas XL, lo cual se agradece enormemente en una época en la que los estereotipos de cuerpos esbeltos y perfectos siguen reinando por doquier.

Sin embargo, debes estarte preguntando qué pasa si tomas unas copitas de más y no cuidas debidamente el vestido rentado. En la nota de remisión de Le Monrob hay un apartado que es como un pagaré que informa que tienes que pagar un extra por el servicio de tintorería exprés en caso de que lo dejes muy sucio.

Cass y Elian determinaron que si entregas el vestido en pésimas condiciones y no se puede volver a usar, debes pagar 3 mil pesos, pero aclararon que nunca han cobrado esta cantidad porque todos los vestidos llegan en excelentes condiciones.

Las clientes de Le Monrob son mujeres de 27 a 29 años mayormente, pero Elian reveló que han tenido clientas de más de 50, quienes han quedado fascinadas con sus vestidos.

Cass y Elian eligen los vestidos de la próxima temporada de acuerdo con los gustos de la clientela, pues siempre repiten los modelos que tuvieron más éxito o intentan buscar algunos con los detalles que más les agradaron a las que rentaron. Por ejemplo, varias mujeres de complexión ancha les comentaron que querían vestidos con mangas y semanas después, los consiguieron.

No sé si has escuchado hablar sobre los trueques de prendas (eventos en los que intercambias ropa seminueva por otra del mismo ‘precio’, el cual es establecido por los dueños de cada prenda).

Respecto a este tema, Elian y Cass comentaron que les interesaría rentar algunos vestidos en buenas condiciones que sus clientas ya no usen a cambio de un porcentaje por cada renta, pero aún necesitan perfeccionar este intercambio para que ambas partes queden conformes.

Otra de las ventajas de los vestidos de Le Monrob es que la mayoría de sus modelos viene con copa incluida, así que no tendrás que estarte rompiendo la cabeza para acomodar tu pechonalidad dentro del vestido.

Actualmente existen varias páginas asiáticas de ropa que ofrecen prendas a muy bajo costo, pero Cass y Elian aseguraron que no consideran que estas páginas puedan ser competencia de Le Monrob porque el tiempo de espera es pieza clave a la hora de comprar o rentar un vestido y, aunque la clienta sea exageradamente precavida y lo busque con dos meses de anticipación, si le llega la talla incorrecta no puede esperarse otra vez a un cambio porque el evento lo tiene encima.

Cass y Elian reiteraron que las telas de la ropa de las páginas chinas son muy delgadas y se pueden romper fácilmente, mientras que en el guardarropa de Le Monrob encontrarás vestidos de calidad y de renombradas marcas, como Ralph Lauren, Calvin Klein, entre otras.

Ahora ya sabes a dónde puedes ir a rentar vestidos por 800 pesos sin necesidad de preocuparte por nada más, pues Cass y Elian se encargarán de los ajustes, la tintorería, el clutch y las recomendaciones de zapatillas; tú solo tendrás que dejarte llevar y consentir por su trato, así que no te preocupes por la siguiente fiesta, pues Le Monrob tiene de todo.

Portada: Anatómica Estudio.

Interiores: Óscar González y Unsplash.