Elon Musk dice que no venderá más acciones de Tesla durante de dos años
Elon Musk, presidente ejecutivo de Tesla, dijo este jueves que no venderá más acciones del fabricante de automóviles eléctricos durante dos años.
En un chat de audio en Twitter Spaces, Musk dijo que prevé que la economía sufrirá una “grave recesión” en 2023 y que la demanda de los consumidores será menor.
Las acciones de Tesla subieron un 3%, hasta los 129.23 dólares, en las operaciones posteriores al cierre del jueves, tras una caída del 11% en la sesión regular.
Musk ha prometido anteriormente que no venderá acciones de Tesla, para luego seguir transfiriéndolas. La semana pasada, Musk reveló una venta de acciones por 3,600 millones de dólares, lo que eleva el total de transacciones a casi 40,000 millones de dólares desde fines del año pasado y frustra a los inversores, ya que las acciones de la empresa se encuentran en mínimos de más de dos años.
Necesitaba vender algunas acciones para asegurarme de que hay pólvora seca (…) para prever el peor escenario posible”, dijo el multimillonario.
Agregó que el directorio de Tesla está abierto a la recompra de acciones, pero que dependerá de la magnitud de una recesión.
Musk afirmó que Tesla está cerca de elegir la ubicación de su nueva “Gigafábrica”. Tesla podría anunciar la construcción de una “Gigafábrica” en el estado de Nuevo León tan pronto como este viernes, con una inversión inicial de entre 800 millones y 1,000 millones de dólares, informó el lunes el diario Reforma.
Cuando se le preguntó si contrataría a alguien como el capitalista de riesgo David Sacks para dirigir Twitter y así poder centrarse en Tesla, Musk esquivó la pregunta y dijo que Twitter era un negocio relativamente sencillo.
“(Twitter) es quizá el 10% de la complejidad de Tesla”, dijo Musk.
Musk ha utilizado cada vez más la plataforma de audio en directo de Twitter para opinar sobre sus productos y decisiones estratégicas en la empresa de redes sociales que volvió privada en octubre, en un acuerdo de 44,000 millones de dólares.
Algunas de sus apariciones han resultado polémicas, como un intercambio con un antiguo ingeniero de Twitter que cuestionaba su aparente plan de reescribir gran parte del código fuente de la empresa.