No hay interés en el Tren Maya ni en Santa Lucía; WTTC pausa inversión en México
La presidenta del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), Gloria Guevara, detalló que la indefinición sobre una política turística y la falta de promoción han provocado incertidumbre entre los miembros del consejo, por lo que decidieron detener sus inversiones en México, a pesar de ser un país relevante e importante para ellos, ya que los dos proyectos principales del Gobierno mexicano, el aeropuerto de Santa Lucía y El Tren Maya, no generan interés.
Al respecto, Gloria Guevara explicó que en el caso de México, algunos integrantes del WTTC han expresado que van a esperar para entender un poco cuál va a ser la prioridad que se le va a dar al sector:
“No quiero decir que son todos, algunos siguen (invirtiendo) en ciertos destinos, Quintana Roo y Los Cabos, por ejemplo, pero ven a México con un poco de incertidumbre”.
Durante una rueda de prensa telefónica desde Nueva York, Estados Unidos, la presidenta afirmó que a pesar de la situación mencionada hay interés por el país y que próximamente estará en México ‘apoyando’ a dos miembros del consejo que tienen planes de invertir.
Respecto a la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México y los pasados seis meses sin campañas en los mercados internacionales, refirió que es otro tema que también ha causado inquietud entre los empresarios turísticos que forman parte del WTTC:
“El impacto todavía no se ve. Hay que recordar que los viajes se venden con tiempo, sobre todo los internacionales. Es importante que los estados, los empresarios mexicanos, el propio secretario de Turismo, cónsules y embajadores, según la estrategia que decidan, estén muy en contacto con los compradores (…) También se entiende que se está definiendo una nueva política y estrategia para compensar la situación con una iniciativa junto con el sector privado”.
Finalmente, la presidenta del WTTC manifestó que el acuerdo celebrado entre los Gobiernos de Estados Unidos y México fue una buena decisión, ya que no ven ‘con buenos ojos’ la imposición de aranceles, pues el comercio no se tiene que utilizar como una herramienta de negociación:
“Quien termina pagando el impacto son los consumidores”.
Con información de El Economista, La Otra Opinión y Pórtico
Fotos: Posta, El Economista y La Otra Opinión