¿A quiénes afectarán los aranceles que Trump impondrá al gobierno de AMLO?
¿Un balazo en el pie?
El presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, amenazó al Gobierno de México, encabezado por el mandatario Andrés Manuel López Obrador, con imponer aranceles del cinco por ciento a distintos productos mexicanos a partir del próximo 10 de junio. Además, sentenció que estos irían con incremento gradual hasta el 25 por ciento; sin embargo, ¿a quién afecta más esta medida?, ¿a mexicanos o estadounidenses?
De acuerdo con el analista económico y director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), José Luis de la Cruz, el incremento de aranceles de Donald Trump afectará en primer lugar a los mismos estadounidenses, así como a los mexicanos que radican directamente en el país del norte. Esto se debe a que los productos de primera mano son complicados de sustituir, por lo que los consumidores seguirían comprándolo pese al costo.
“El aguacate, tequila, algunas hortalizas, verduras que han ganado presencia y que no son de fácil sustitución, no perderían mercado, el consumidor norteamericano no encontraría la proveeduría de producto similar, por lo que terminaría pagando”
Asimismo, los productos del sector automotriz ( autopartes o vehículos) difícilmente pueden ser sustituidos, por lo que los aranceles de Donald Trump obligará a las empresas de este rubro a planear bien sus estrategias de venta para afrontar la situación.
En ese sentido, Manuel Valencia, profesor de negocios internacionales del Tecnológico de Monterrey Campus Santa Fe, explicó que los importadores de productos y alimentos no van a absorber el incremento, sino que se lo van a trasladar directamente al consumidor, es decir, al ciudadano que reside en Estados Unidos.
¿Y en México?
Por otro lado, en México se vivirá una situación distinta, aunque igualmente adversa que en Estados Unidos, pues los aranceles afectarían en el empleo asociado a las empresas que se dedican a la exportación, ya que si se aplican sanciones mayores al quince por ciento habría un freno en la economía mexicana. Lo anterior agravaría al Producto Interno Bruto (PIB) y daría una cifra negativa al crecimiento que propuso en un principio Andrés Manuel López Obrador.
En este contexto, el crecimiento marginal pegaría en el empleo, y por obvias razones, al consumo en el país. En el peor de los casos se generaría un ambiente adverso para la inversión que impedirá reactivar la economía con facilidad.
Con información de Milenio y Animal Político
Foto: Guillermo Moreno/Cuartoscuro