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Lo que no hemos aprendido desde el crack del 97

Lo que no hemos aprendido desde el crack del 97

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Lo que no hemos aprendido desde el crack del 97

El 19 de octubre de 1987, comenzó uno de los episodios más tristes para los inversionistas, el llamado “crack búrsatil” en el que el valor de las acciones cayeron hasta 70 por ciento. En ese entonces la Bolsa Mexicana de Valores pasaba por un periodo de crecimiento acelerado y excepcional, lo que despertó el apetito de muchos mexicanos por invertir en Bolsa.

La fiebre por ganar atractivas cantidades de dinero e incluso duplicar lo invertido propició que muchas personas colocaran todo su patrimonio en el mercado bursátil sin pensar en los riesgos. El experto Joan Lanzagorta detalla que “hubo gente que hipotecó su casa para invertir ese dinero en la Bolsa, con la esperanza de multiplicarlo. Metían ahí la colegiatura de sus hijos porque como todo subía, era fácil obtener rendimientos en pocos días”.

Sin embargo cuando la Bolsa cayó, el pánico por la pérdida fue estrepitoso, causando miedo entre los inversionistas los cuales vendieron sus acciones en el peor momento; un año después, los mercados se habían recuperado, pero quienes habían desinvertido en ese momento recibieron la pérdida de su patrimonio y varios problemas financieros.

Después de 35 años del crack bursátil, los expertos aseguran que muchos inversionistas siguen replicando los mismos errores de ese momento, ya que existen factores clave que no se han aprendido al momento de invertir.

Uno de los errores más comunes en los que caen los inversionistas es dejarse llevar por la euforia de las inversiones, de acuerdo con GBM muchas personas deciden invertir cuando los mercados se encuentran en alza con la esperanza de obtener altos rendimientos, sin embargo debido a la falta de educación financiera toman decisiones que los pueden llevar a la pérdida de su dinero.

“Algunos inversionistas con menos experiencia creen que pueden ganar dinero fácil y rápido, por ejemplo tras la pandemia en medio de la recuperación de los mercados, comenzó una ligera subida, lo que propició que algunas personas comenzarán a invertir, compraron acciones de empresas que conocían y ganaron dinero rápido. Esto ocurre con frecuencia, cuando la Bolsa o cualquier instrumento va subiendo la gente quiere invertir, sin embargo cuando viene la bajada existe un nerviosismo y terminan haciendo lo opuesto a lo recomendado”, comentó Andrés Maza director de inversiones de GBM.

Algunas de las ideas que prevalecen entre los inversionistas es suponer que existe un buen o mal momento; Maza explicó que muchos inversionistas se centran en la idea de entrar o salir del mercado en el momento correcto para generar rendimientos constantes, escenario que de acuerdo con el experto es complicado predecir incluso para los asesores financieros.

“Una pregunta común es sobre si es buen momento para invertir; siempre es buen momento, el mercado va a tener subidas y bajadas, un ejemplo es la Bolsa de Nueva York, –el New York Stock Exchange (NYSE, por su sigla en inglés)– durante los últimos 50 años ha tenido un crecimiento de 12%, con años de crisis financieras y caídas fuertes. Hoy la caída de la Bolsa puede verse como una oportunidad, sin embargo es importante crear un portafolio diversificado pensado en nuestra aversión al riesgo y metas financieras”, comentó José Alfredo Álvarez, especialista en finanzas e inversiones de Flink.

Álvarez detalló que algunos usuarios al comenzar a invertir no contemplan el riesgo asociado a los rendimientos y el tiempo que desean mantener su dinero en los instrumentos, lo cual no solo les podría generar la pérdida de capital sino también la exposición de sus datos, ya que pueden caer ante inversiones fraudulentas.

La clave para invertir

Los expertos comentaron que, si bien no es malo ser motivado por un buen momento del mercado, es importante que los inversionistas conozcan factores como su nivel de aversión al riesgo, así como el funcionamiento de los instrumentos en los que se planea invertir, estos factores en conjunto con la diversificación de las inversiones e instrumentos pensados en el corto, mediano y largo plazo permitirán tomar decisiones basadas en una estrategia.

“Lo más importante antes de pensar en las subidas o bajadas del mercado es conocernos a nosotros como inversionistas, saber cómo funcionan los instrumentos, cuando los inversionistas entienden esto saben que las correcciones serán momentáneas y que vendrá después una recuperación”, comentó.

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