El poder femenino, presente en el Abierto GNP Seguros

El deporte tiene el poder de trascender las barreras de sexo, nacionalidad, raza y religión.

Promueve la salud y el bienestar, mejora la autoestima y fomenta la perseverancia, habilidades para trabajar en equipo y liderazgo.

Las mujeres en el deporte desafían los estereotipos de género, se convierten en la inspiración como modelos a seguir y muestran a hombres y mujeres como iguales.

Según las estadísticas, las mujeres son más visibles en el deporte hoy más que nunca. De un total de 997 atletas, sólo 22 mujeres compitieron por primera vez en los Juegos de 1900 en París.

Londres 2012 fueron los primeros Juegos en los que se presentaron mujeres a competir en todos los deportes del programa olímpico.

Como muchos sectores han reconocido cada vez más, las mujeres amplían las perspectivas, aportan nuevas ideas e innovaciones y llegan a nuevas audiencias.

Entre ellos, el tenis se ha convertido en una plataforma importante para México y Latinoamérica en lo que al empoderamiento femenino se refiere, mostrando el poder de la mujer en la sociedad, con una de las máximas exponentes de este deporte como lo es Serena Williams, que llegó rompiendo estereotipos.

Así como en los últimos años se ha visto presencia de sangre latina dentro del tour de la WTA, teniendo grandes representantes tanto en dobles como en singles.

Esto es posible gracias al desarrollo, esfuerzo, sacrificio y perseverancia de cada una de ellas, pero también un factor importante es el apoyo de las personas, marcas y lugares que apuestan por ellas y a los torneos en los que participan, como el Abierto GNP Seguros.

Fiel a su estilo, este torneo es una casa para las mexicanas así como para las latinoamericanas que buscan acumular puntos para así clasificarse a torneos de mayor exigencia competitiva, otorgándoles la oportunidad de competir ante figuras importantes.

Un ejemplo de ello es la entrega de wildcards tanto para la ronda de calificación como para el cuadro principal del torneo, que ha sido clave para ver en las instancias finales a estas tenistas.

La primera vez que se vio en este torneo fue en el 2018, cuando Giuliana Olmos quien ahora es número siete del mundo en la modalidad de dobles, que llegó a la final, y en la edición anterior.

Y también para la colombiana número 70 del mundo, Camila Osorio, quien también disputo una final, en la modalidad de singles.

La misma colombiana ha mencionado en diversas ocasiones la gratitud a este torneo, considerándolo fundamental para que la sangre latina siga presente en diferentes competencias internacionales de mayor nivel, como un Grand Slam, al ser este una antesala importante para aspirar a ello.

“Este torneo me ayudó porque me dieron la oportunidad de jugar acá por primera vez en un WTA fuera de Colombia y fue una bendición, tuve la chance de jugar con jugadoras de mucho nivel.

“Por ejemplo, el 2021 creo que fue mi mejor año y nada, creo que ha sido increíble tener la oportunidad de jugar cerca de mi casa por el trato que recibo cuando juego acá, Monterrey es increíble así que creo que me ha ayudado mucho también en los puntos, el poder sumar, y todo es algo muy muy bueno”, declaró la jugadora.

Esto ha servido para que nuevas generaciones se coloquen en la disputa por el mismo objetivo, como es el caso de la mexicana Fernanda Contreras que en poco tiempo ha evolucionado mucho en su juego, avance del cual Monterrey ha sido testigo.

La tenista de 25 años ha representado a México en tres torneos Grand Slam como Wimbledon, Roland Garros y el US Open, y para este torneo WTA 250 ha recibido dos “wildcard”, la primera en el año 2022 para “qualys” y en este año para el cuadro principal, oportunidad que está aprovechando al máximo.

“La verdad el deporte me ha ayudado muchísimo, me ha abierto muchas puertas, me ha ayudado a ir a la universidad, a viajar, conocer el mundo, hacer muchas amistades nuevas, me da confianza, el poder viajar y jugar el deporte que amo.

“Y en segundo, muchas gracias aquí a Monterrey, a la organización y a todos porque este torneo es magnífico, tenemos a muchísima gente buenísima en tenis, muchísima porra, o sea, al público mexicano nadie le gana y tener esta oportunidad para las mexicanas de poder jugar un WTA en casa, la verdad que no tiene precio”, indica Contreras.

También, acepta la importancia que juega en la motivación personal el hecho de poder tener la oportunidad de jugar un torneo de esta categoría en casa y lo que ha funcionado para madurar en el deporte tanto a ella como a sus compañeras.

“He visto mucho crecimiento, sé que el equipo mexicano trae mucho ‘fire power’, Gugu (Giuliana Olmos) llegó aquí a la Final hace 2 o 3 años, le fue muy bien, está en el top 10 del mundo, Renata llegó a dos Finales a principio del año, Marcela llegó a semis en un 60, aquí tuvo un draw difícil en qualy, pero aun así está jugando muy bien, la verdad me encanta que nos dan chance de jugar, que nos dan los wildcards y que tenemos esa experiencia, la verdad nos ayuda mucho en el tour”, expresa Contreras.

La dupla mexicana para este torneo estuvo compuesta por la potosina Marcela Zacarias y por la tapatía Renata Zarazúa, representante mexicana de los recientes Juegos Olímpicos, mostrando el poder femenino para mantener cautivo a un público por su manera de jugar.

Marcela, hace notar el trabajo de la organización por tener una mejora continua en este evento.

“Yo creo que justo ahorita las mexicanas estamos en muy buen momento, vamos de menos a más, yo creo que los últimos cuatro o cinco años todas hemos estado entre las doscientas del mundo, así que eso es muy importante para las nuevas generaciones, para que tengan mucha motivación para jugar tenis y yo creo que ahí vienen varias niñas que están jugando muy bien en los juveniles que espero que después tengan la oportunidad de jugar aquí”, dice Zacarías.

En esto coincidió su compañera de equipo al destacar el gran trabajo que están haciendo las mexicanas en el tour y cómo su desarrollo ha sido favorable, y como incluso entre ellas se apoyan para seguir avanzando.

De igual manera habló de como este torneo ha sido una gran oportunidad de empoderarse en el deporte al poder estar en casa, con un público apoyándolas y lo más importante, como éste las ha impulsado a seguir mejorando y poder participar en torneos con más puntuación.

“Creo que este es un torneo que nos impulsa mucho para llegar a grandes torneos, al final hay muchas latinas, muchas mexicanas, pero nos falta dar ese paso extra para llegar a los torneos grandes, creo que nos falta mucho corazón y creérnosla”, dice Zarazúa.

Las cuatro tenistas destacan el trato de la organización, la entrega del público y como cada vez es mejor para ellas en cuestión de juego y de posicionamiento del torneo regio, que tiene el objetivo de convertirlas como mexicanas en grandes representantes del tenis a nivel mundial.

La oportunidad de pertenecer y permitir estar, es algo en lo que coinciden las 4 tenistas, un torneo al que les gusta regresar por todo lo que este significa en sus carreras.

El deporte ayuda como con todo ser humano, a mejorar en diversos aspectos de tu vida, y es así como incluso el reconocimiento del público, el representar una bandera, con un sentido de pertenencia que se hace notar en cada aplauso, y en cada “México” o con la alegría que caracteriza a los latinoamericanos en un deporte donde solo en los momentos más cerrados, hacer notar rus sentimientos, donde la concentración y confianza son pieza clave para triunfar, basándose en el autoestima de su juego.